Los éxitos de Don Bernardo y su Filarmónica

Les dejamos un texto de José Manuel Cañas Reillo, científico titular del CSIC, en su blog criptanaeneltiempo.wordpress.com del pasado 26 de Marzo en el que nos habla del Primer Premio logrado por nuestra Banda con D. Bernardo Gómez como director de la misma en en Certamen de Bandas de Ciudad Real en el año 1887. Como curiosidad, decir que se trata de nuestro premio más antiguo:

"Irá, de paso, el caminante por una plazoleta criptanense, la del Conde de las Cabezuelas, y podrá contemplar, allí, en su parte más alta, un recuerdo necesario para Criptana de quien tanto hizo por la música en la localidad. Es el monumento a don Bernardo, a don Bernardo Gómez, farmacéutico de oficio y músico de vocación, músico y director, músico y compositor. Párese el caminante un momento, y observe cuánto hay detrás de ese homenaje, discreto, ciertamente, en su contexto. Párese el caminante y deje que resuene en su mente… Limiñana, la gran obra de don Bernardo, que no la única, ese Limiñana que, la menos una vez al año, interpreta la Filarmónica Beethoven cual si de un himno a Criptana se tratase.

Rememore también el caminante, entretanto, éxitos de don Bernardo, que fueron muchos, no exclusivamente debidos a él, sino también a su banda. ¿Qué es un director sin su banda? ¿Y una banda sin su director? Tanto monta, monta tanto. Uno de ellos ocurrió en 1887, y fue en Ciudad Real. Nos lo recuerda el periódico Eco de Daimiel, nº 208, del 31 de agosto de 1887, en forma de sentida felicitación a director y banda por su gran éxito. Dice su texto:

Damos la más cumplida enhorabuena al director de la banda de música de Criptana, el ilustrado farmacéutico D. Bernardo Gómez, por el éxito alcanzado en el certamen musical de Ciudad Real en el que logró, con justicia no discutida, el primer premio.

Maestro y discípulos fueron recibidos al regreso de un modo tan entusiasta por sus paisanos que siempre recordarán con placer las muestras de cariño de que fueron objeto.

Tan lisonjero resultado merece continúen trabajando en el divino arte, dedicándole constante culto.

Fue, entonces, don Bernardo y fue con él su banda a Ciudad Real. Imaginemos el viaje en aquellos tiempos. ¿Fueron quizá por carreteras y caminos polvorientos en pleno verano?. Imaginemos el viaje, quizá en galeras, de varias horas a Ciudad Real. A lo mejor, bajo el sol, bajo el toldo de una galera o de una tartana, algún músico iba ensayando su instrumento, o a lo mejor, un grupo de músicos se puso de acuerdo, y recreó un pequeño concierto, entre el traqueteo de su carro, bajo el sol de la canícula, camino de Ciudad Real… evocando, quizá, el intermezzo de Cavalleria rusticana. ¿O a lo mejor fueron en tren, que sería lo más cómodo y rápido?. Creo que lo mejor es pensar que fueron en tren, cargados con sus instrumentos, pero la imagen del pequeño concierto bajo el cielo manchego, cielo de canícula, no lo podemos negar, tiene su encanto.

Y llegaron don Bernardo y su banda y triunfaron. ¡Qué gusto y satisfacción! Recuérdelo el caminante cuando vuelva a pasar ante el monumento… que don Bernardo y su banda cosecharon éxitos mucho, mucho antes, de lo que podríamos haber imaginado."

XXI Concierto de Música de Semana Santa

75 años acompañando a Jesús Nazareno

Este 2019 se conmemoran los 75 años que nuestra Banda acompaña a la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Soledad Angustiada. Por ello la Hermandad en su boletín anual han repasado estos 75 de historia. Un escrito de Jesús García Casarrubios Fernández de Quero:

"Pasada la contienda civil y reorganizadas las procesiones en 1940 nos encontramos que, en estas, el acompañamiento musical era muy distinto al que ahora se puede contemplar en nuestras calles.

Hasta 1945 eran carros, sordinas, tambores y campanillas las que precedían a la imagen de Jesús Nazareno en la mañana del Viernes Santo.  La función de los tres primeros era ir haciendo burla a la sagrada Imagen con sonidos estridentes y las campanillas anunciando su llegada. Todas ellas eran subastadas el Domingo de Ramos, no necesitando ensayo previo.

En 1944, la Junta de D. Emiliano de Torres dispone la contratación de la Filarmónica Beethoven para la procesión del Paso, de tal manera que durante ese año y el siguiente, carros, sordinas, tambores y campanillas iban delante del paso y la Banda detrás, como un penitente más. El conjunto originado alrededor de la Imagen debía ser curioso y no del agrado de todos, dado que en 1946 se opta por la eliminación de la parte burlesca, quedando la configuración como hoy la conocemos. Hasta el año 2002, la banda se mantuvo detrás de las cruces, pero llegó un momento en que el número de penitentes detrás de Jesús Nazareno hacía inviable esta posición, teniendo que tomar la Junta, la decisión de situar a la Filarmónica delante de la Imagen, tal como se procesiona en la actualidad.

Otro momento en el que la Banda acompañaba a nuestra Cofradía era en los Viernes de Dolores. Desde 1940 se celebra en la Madre de Dios el novenario a la Dolorosa y en 1946 da comienzo el culto cuaresmal a Jesús Nazareno. Al año siguiente todo ello se traslada al Convento (Iglesia Parroquial entonces de Criptana). Es desde ese año 1947, cuando se le encarga a la Filarmónica participar en el traslado de vuelta que las Imágenes hacían hasta la Madre de Dios, dando así comienzo los Viernes de Dolores en Criptana. Esta procesión se mantuvo hasta 1961, al año siguiente y sucesivos, sería la Hermandad de San Juan la encargada de procesionar a su recién llegada Virgen Dolorosa en las noches del inicio de la Semana Santa criptanense.

Por último, tenemos la incorporación a la procesión del Miércoles Santo con Jesús Nazareno. En el año 2004, la Junta decide su contratación para acompañar a nuestra Imagen titular, la cual hasta ese año procesionaba sin Banda. Desde hace unos años el número de personas que deciden ir detrás de la Imagen en esta procesión hace que la posición de la Banda sea cada vez más retrasada con respecto al paso, como ya ocurrió en la procesión del Viernes Santo.

En estos 75 años se han forjado momentos muy especiales alrededor de sus marchas. Sin duda el más conocido es la interpretación de “la Madruga” de Abel Moreno en la calle Soledad. Quien le diría a este afamado compositor que esos 8 minutos y 32 segundos serían los necesarios para que Nuestro Padre Jesús Nazareno llegara a la primera caída desde su salida en la Madre de Dios, en la mañana del Viernes Santo. Otro momento que particularmente me emociona es el tránsito por la calle Convento interpretando “Nazareno de la Soledad Angustiada” de nuestro paisano Ángel Luis Cobos, el cual dedicó la marcha a nuestro Titulares y la Filarmónica lleva en su repertorio desde el año 2015.

Solo nos queda agradecer estos 75 años juntos y confiar en que la colaboración entre ambas instituciones continúe como hasta ahora."